Desde Cajatambo Perú.

jueves, 15 de noviembre de 2018

LADRONES EN PALACIO DE GOBIERNO

 Según Ricardo Palma, el presidente de turno del Perú,  Felipe Santiago Salaverry, había salido en campaña hacia Arequipa  para consolidar su gobierno, recién iniciado mediante un golpe de estado contra Luis José de  Orbegoso (febrero de 1835); dejó como encargado al coronel José Ángel Bujanda. Éste tuvo que salir hacia Miraflores y  zonas aledañas a combatir  a montoneros. Mientras tanto, venciendo la resistencia de media docena  de soldados a cargo de un sargento, una pandilla de bandoleros al mando del " Negro"  León Escobar se apoderó del Palacio de Gobierno. Ahí, sentado en el sillón presidencial, Escobar recibió a dos regidores de la Municipalidad de Lima, quienes habían acudido  alarmados a pedirles que por favor no cometan desmanes. Los intrusos se comprometieron cortésmente a cumplir la petición, siempre que le entreguen la suma de cinco mil pesos, para la manutención de sus hombres. Luego de varias horas los concejales volvieron con la mitad de la suma exigida.
El trato se cerró y los bandoleros cumplieron con el compromiso, abandonando el palacio pacíficamente.
Desde entonces,no habían vuelto a entrar bandidos al Palacio de Gobierno. Hasta que, en estos último tiempos, ladrones de cuello y corbata sí lo hicieron, no por la vía del asalto como  León  Escobar, pero sí disfrazados  de políticos demócratas. Usaron para robarle dinero al país medios sofisticados y complicados, no muy fáciles de descubrir, que se concretaban en entrega de obras gigantes, a veces casi inservibles, a grandes empresas nacionales y extranjeras, por montos de dinero que habiéndose pactado en una suma, éste iba paulatinamente subiendo, mediante artimañas insertas en el contrato, llamada adendas,  con lo que la suma total al  final podía llegar al doble  de lo inicialmente pactado o, aún sobrepasar. Todo eso a cambio de una coima millonaria que se depositaban en cuentas cifradas, en países en donde los bancos suelen  mantener  en secreto la identidad de los titulares de las cuentas.
Varios ex presidentes están en el banquillo de los acusados, con indicios y pruebas de presuntos robos. Desde el que prometió honradez tecnología y trabajo, pasando por el Cholo Sano y Sagrado,  aquel del que dicen que "sabe robar",  aquellos "cónyuges de gobierno", etc. Es decir, el cholo,  el criollo, el gringo, y todos. 
El pueblo peruano espera el pronto y justo veredicto de los jueces honestos. Pero estamos viendo que la mafia conocida como los "cuellos blancos", enquistado en los órganos de administración de justicia, está pugnando por imponerse en varios casos, a fin de declarar inocentes a los culpables.  Lo más lamentable del caso es que esa mafia cuenta con el visible y desvergonzado apoyo de la mayoría de congresistas.